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Loro Parque vuelve una vez más a rubricar su compromiso con la investigación al acoger la primera prueba de marcaje no invasivo en cetáceos a través de la colocación de un sofisticado cinturón acomodado en la cola de la orca Keto.

Este preestudio pionero, realizado hoy en OrcaOcean por científicos islandeses y daneses, consiste en validar la viabilidad del dispositivo y comprobar que no genera ningún tipo de problema en la piel del animal. La meta final de este procedimiento es marcar ballenas Yubarta en el mar.

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En cuanto a su metodología, se trata de la colocación de un cinturón en la cola del animal que lleva incorporado un aparato que aporta datos fundamentales para estudios de geolocalización, comportamientos alimenticios y movimientos verticales, entre otros.

Además, las marcas tomarán y procesarán datos oceanográficos que se utilizarán para evaluar cuestiones relacionadas con el clima y el cambio climático, dado que el objetivo es disponer de una red de sensores instalados en ballenas jorobadas en diferentes lugares del planeta que permitan, no solo saber más sobre su biología, sino obtener información global sobre el clima.

Tras la prueba realizada con la orca Keto, el resultado ha sido satisfactorio: No ha supuesto ningún problema en la piel del animal y se ha demostrado que no afecta a los movimientos del cetáceo; su material es flexible, deja pasar el agua y evita el rozamiento.

Una vez verificado el éxito de la prueba, los investigadores nórdicos que se dieron cita en Loro Parque llevarán a cabo el marcaje de dos ballenas jorobadas en Islandia, cuya información posterior servirá también para conocer más sobre los procesos de migración de estos cetáceos.

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Tanto el director adjunto de Loro Parque Fundación, el doctor Javier Almunia, como el responsable de OrcaOcean, Rafael Sánchez, valoraron de forma positiva la viabilidad inicial de un sistema de marcaje no invasivo frente al marcaje tradicional con arpones que genera incomodidad y puede causar lesiones en el animal.

Sin este tipo de pruebas resultaría complicado constatar que el diseño funciona. Por esta razón, las orcas de Loro Parque contribuyen en el desarrollo científico y ayudan a facilitar la información necesaria para beneficiar a los cetáceos; son los auténticos embajadores de los propios animales.